El peligro se encuentra en todas partes...
El simple hecho de cepillarse los dientes o darse un baño, podría acabar en una mala pasada, al punto de perecer. Podemos morir atragantados por una goma de mascar. Ahogados por un vaso de jugo. Incluso hasta por estornudar...
Este escritos es traído a ustedes gracias a una colaboración por parte de nuestro colega Javier Bañares, de quien continuaremos colocando escritos en, al menos, dos ocasiones más. Estén pendiente de su trabajo.
Feliz día.