Hmm... Algo no encaja en esta imagen...
El fin de semana pasado inició la Feria del Libro en mi país, Venezuela. La verdad es que, por mi naturaleza, salir de mi hogar, a veces, resulta bastante molesto, fastidioso y agotador, sin mencionar que la universidad con el pasar de los días ha comenzado a drenar cada vez más mi energía vital. No obstante, de algún modo casi milagroso, conseguí acercarme a la feria de forma consecutiva (estuve también en la del año pasado). En fin, eso no es a lo que vengo…
Como bien dice el título, hay cosas de ciertos lugares y eventos que nos disgustan, ya sea por la ubicación o el tipo de gente que corremos el riesgo de conseguir -como la persona que dice estupideces en medio de la proyección de una película en una sala de cine- y, que en el caso de la Feria del Libro, particularmente a mí, me exasperan hasta sacarme de mis casillas. Por ello, aprovechando que todavía tengo mis memorias bastante lúcidas, he decidido compartirlas con ustedes.
Cabe destacar que no hay orden alguno. Las odio por igual XD.
La primera es la gran distancia que abarca todo lo que compone la feria como tal. Básicamente es más capricho que otra cosa, pero hay veces que simplemente no provoca caminar tanto. ¿Acaso no les ha sucedido algo así? ¿Andar por un mall o similar y sencillamente no tener ganas de mover un solo pie? A mí me ha pasado.... y con frecuencia.
La segunda es ver en cada uno de los puestos, los MISMOS LIBROS exhibidos. Es como tener un deja vu infinito cada vez que cambio de lugar. En un puesto consigues ver novelas de García Márquez o de Otero Silva, y en el siguiente vuelves a ver lo mismo. Es como si hubiesen amarrado mi cuerpo a una silla, colocado cinta adhesiva a mis ojos y me hubiesen hecho ver los teletubbies de inicio a fin durante todo el día.... No hay peor tortura que esa.
La tercera cosa que me disgusta de pisar una feria del libro en mi país es que en cada rincón en el que llevas la mirada, siempre, repito, SIEMPRE, encuentras a uno de esos viejos locos que se la dan de eruditos, que analizan la situación del mundo con un tacto casi de académico veterano que rescatan la idea de Marx sin un argumento realmente válido y que además, lo vociferan para que todos lo escuchemos -como si yo hubiese ido exclusivamente a escucharles decir todo aquel sendo de pistoladas-.
La última cosa que detesto y que a diferencia de las otras tres, es exclusiva de mi país, es el continuo recordatorio político de la vida y obra del fallecido presidente Chávez. Independientemente de la postura política, considero inapropiado, que este tipo de eventos estén envueltos en proselitismo político. No creo que sea sensato ese continuo merengue para recordar un bando político. Es decir, se llama “feria del libro”, no feria para recordar la vida y obra de un presidente que ya está muerto...y de los libros.
En fin... ignorando todo eso, si eres de Venezuela, igualmente diría que pases a echar un vistazo. Quizás veas cosas sexys, suponiendo que te de el cash para comprarlas, y si eres de otro sitio, pues acércate a los eventos de tu país que tengan este tipo de características. Siempre hay cosas que ver, muchas veces repetidas hasta el cansancio, pero de cuando en vez, conseguirás algo único que querrás tener y que en ninguno de los otros puestos habías visto.
Bueno ya con esto termino de desahogarme ¡Feliz lectura!