Podría decirse que el arte es todo aquello capaz de capturar nuestra atención el tiempo suficiente para hacernos examinar minuciosamente cada detalle de la pieza en cuestión, generando en nosotros, por lo general, impresión y empatía. Hoy día se entiende que el arte es un concepto subjetivo para cada individuo y por ende, puede entenderse como la representación de un imaginario que muchas veces a uno como espectador, suele inspirar.
En el caso de las pinturas o cuadros, los elementos que llaman la atención pueden ser el trazo, los colores, los materiales usados o la temática en sí. Cualquiera de estas características pueden a su vez despertar en nosotros una especie de éxtasis mientras nos deleitamos en la apreciación.
Así como los tipos de arte, existen muchas clases de entretenimiento como los videojuegos, la música, los deportes y los juegos de azar. En estos últimos en particular, tenemos a los juegos de cartas clásicos, para los que se pueden usar la baraja española o la baraja francesa, y otros de la era moderna como los juegos de cartas coleccionables, conocidos también como TCG por sus siglas en ingles (Trading Card Game).
Estos juegos de cartas alternativos iniciaron su viaje por hallar su lugar en el mundo por la década de los 90s y a día de hoy, existe una variedad casi abrumadora de TCG para escoger, que a su vez producen e imprimen expansiones o sets de nuevas tarjetas que saldrán al mercado a lo largo del año. Entre los más populares están Magic: The Gathering, Yu-Gi-Oh!!, Cardfight Vanguard!!, WeissSwcharz y Future Card Buddyfight. Todos ellos ofrecen un sistema de juego adictivo, con mecánicas exclusivas y estrategias diversas, haciendo que la diversión nunca pare. Pero, al ser productos que basan su forma de juego en la construcción de barajas y la interacción entre cartas, teniendo al mismo tiempo una cantidad aproximada de 5.000, 8.000 o incluso 12.000 tarjetas disponibles para escoger, es necesario tener un método fácil y eficaz para recordar qué hace cada trozo de cartón con solo entreverlo, y qué mejor forma de hacerlo que dotando a cada carta con un pequeño dibujo, único además. Es por ello que las distintas compañías que promocionan esta clase de juegos (como Wizards of the Coast, Bushiroad y Konami por citar algunas) contratan a cientos de artistas para que ilustren sus tarjetas.
Las personas familiarizadas con los juegos de cartas coleccionables sabrán que cada juego tiene una especie de mercado secundario en el que las cartas tienen un valor individual, el cual es determinado por factores como popularidad, jugabilidad, edad, edición, entre otros, de dicha carta. Ahora bien, lo que quizás no sepan es que también puede existir otro mercado en el que se venden las piezas de arte individual de las tarjetas.
(Retrato utilizado para una carta junto a la misma).
En el caso de Magic: the Gathering, este mercado existe, cientos de coleccionistas cazan sus piezas de arte preferidas para adquirirlas, y varios de los artistas que la compañía desarrolladora, Wizards of the Coast, contrata para que diseñen las ilustraciones de sus nuevas tarjetas están al tanto de este hecho. Por lo que si el trabajo de alguno alcanza cierto nivel de prestigio dentro de la comunidad del juego, surge la oportunidad de que el artista pueda subastar tanto sus piezas originales como los bocetos por una suma de dinero considerable.
(Aquí podemos ver una de las subastas más recientes de una de las artistas más populares dentro de la comunidad de Magic).
Mientras tanto, los TCG japoneses se valen de artistas que, al ser grandes fanáticos del mundo del manga y el anime, han desarrollado un estilo particular con el que muchas veces ilustran piezas de arte que recuerdan a las obras clásicas de la historieta y animación japonesas, como también algunas series de televisión de este estilo. Muchos de estos admiradores convertidos en afamados artistas se pueden encontrar en la web, algunos tienen páginas propias y otros simplemente tienen cuentas en comunidades online, como Pixiv por ejemplo.
(Hmmm, esto resulta ser extrañamente familiar...).
Como podrán ver con todo lo anterior dicho, pasa y resulta que el arte está en todas partes. Es sin dudas maravilloso lo que estos juegos de cartas han creado, no solo como medios de entretenimiento, sino como vías por las que diversos artistas tienen la oportunidad de mostrar sus trabajos al mundo.
Pareciera que hoy, más que en otras épocas, con tan solo mirar un poco más allá se puede encontrar un nuevo mundo de posibilidades, y recuerden, que una ilustración no sea exhibida en un museo o se subaste en una sala llena de gente con grandes bolsillos, no quiere decir que aquello no sea arte...
Pareciera que hoy, más que en otras épocas, con tan solo mirar un poco más allá se puede encontrar un nuevo mundo de posibilidades, y recuerden, que una ilustración no sea exhibida en un museo o se subaste en una sala llena de gente con grandes bolsillos, no quiere decir que aquello no sea arte...